La limpieza del hogar siempre suele ser difícil, especialmente, si se trata de limpiar algún electrodoméstico. El horno, por ejemplo, llega a ser bastante complicado debido a que acumula mucha suciedad como resultado del gran uso que se le da.
Pero gracias al siguiente truco, podrás limpiar tu horno de forma más rápida y sencilla. Lo mejor de este remedio es que, además de ser sencillo, no necesitas utilizar productos químicos o detergentes que dañen la apariencia de tu horno.
Ingredientes
– Agua
– Levadura en polvo
– Una botella de spray
– Vinagre
– Un paño de cocina o una esponja
– Un tazón pequeño
Para comenzar a limpiar tu horno, retira la parrilla y los soportes interiores. Toma el tazón o el recipiente que usarás y mezcla dos cucharadas de levadura con agua hasta que obtengas una pasta, la cual esparcirás sobre todas las superficies que desees limpiar. Asegúrate de que también colocas la pasta en el interior de tu horno.
Una vez que hayas cubierto todas las superficies, deja reposar la pasta durante toda la noche pues para tener un buen efecto la levadura necesita trabajar durante 12 horas. A la mañana siguiente, remueve la pasta con un paño húmedo.
En caso de que te queden restos, vacía un poco de vinagre en la botella de spray, rocía en las partes a limpiar y seca con un paño húmedo. Finalmente, inserta la parrilla y los soportes, y enciende el horno a una temperatura baja durante 15 o 20 minutos para que se seque.
Este truco de limpieza es tan eficiente que también puedes utilizarlo para limpiar tus ventanas. Para hacerlo, usa la misma pasta que hiciste para limpiar tu horno y aplícala sobre el cristal. En este caso, espera media hora y utiliza un paño o una esponja para retirarla.